Éste es el lugar del mundo donde todo se hace fácil:
la tristeza, la partida, incluso el acontecimiento,
y el adiós temporal y la separación.
El único lugar de la tierra donde todo se hace dócil.
Éste es el lugar del mundo en que la tentación
se vuelca y se pone del revés,
porque lo que aquí tienta es la sumisión
y el ofuscamiento en la inmensidad del universo.
Nos han dicho tantas cosas, oh reina de los apóstoles,
que no nos atraen los discursos.
Ya no tenemos más altares que los tuyos,
ya no sabemos más que una simple oración.
Charles
Péguy